ARTE CINÉTICO ARGENTINO

        por OSCAR HAEDO

 
 
CAPITULO VI  
LE PARC
Los Generativos
 
06/08 1973. OTRAS DECLARACIONES DE LE PARC.

            En discrepancia con quienes definen a sus obras cinéticas –al par que las ejecutadas en equipo con el GRAV- como connotaciones tendientes a estructurar a un arte científico, Le Parc aclara:

        Puede haber una relación arte – ciencia, que nuestra manera de hacer tenga cierto paralelismo con la manera en que los científicos experimentan, es decir, basándose en los hechos y buscando relaciones, alejado de la búsqueda de medios expresivos. De una manera clara nosotros probamos las cosas y las vamos viendo, mientras vamos tratando de encontrar ciertos elementos que permitan situaciones. Es decir, tratando de hacer una experiencia, haciéndola, aparecen otras situaciones que llevan a otras experiencias.

Es decir, hay una relación entre el hacer y lo que se quiere hacer, pero fuera de eso no hay mucha mayor preocupación y estamos lejos de lo que cierta gente podría llamar un arte científico. A diferencia de un arte subjetivo, hacer un arte científico a mí no me interesa. [89]

En polémicas declaraciones, en 1973 Le Parc sigue definiendo a su labor por medio de un diario de Buenos Aires, en estos términos:

  En lo que a mí concierne no es la obra cinética lo que yo trataría de ubicar, es decir, no me trataría de ubicar en este caso yo mismo.

Para desarrollar mi actividad he realizado obras que luego fueron calificadas por otros de cinéticas, con ese afán de clasificar que tiene la crítica de arte.

Pero eso es completamente falso. En París, en 1958, y en los años sucesivos, en base a la situación de ese medio, a lo que allí se hacía, a lo que yo llevaba como preparación o como quiera llamarse, realicé una experiencia con otra gente, que luego fue denominada como arte cinético.

Dar eso como valor universal o como escuela única a seguir es completamente falso. Hice otras cosas que no han tenido ningún carácter cinético; en algunos casos fueron figuras, en otros simples afiches con textos e imágenes. No hago esa distinción que otros hacen, que lo cinético es lo más importante y que lo demás no sirve para nada.

Entiendo que puede ser un medio notablemente eficaz dentro de esa línea destinada a estimular la capacidad creativa de la gente, pero no descarto a la gran cantidad de tendencias que se manifiestan por imágenes. Según la incidencia que se quiera tener en el medio se puede hacer uso de todo eso que existe y al mismo tiempo inventar otras cosas si es necesario.

En cuanto al arte cinético que se hizo en aquella época, no pienso que haya que exportarlo a países como éste. Si el que está en ese tipo de tendencias, lo hace porque puede conseguir un mercado, vivir de eso y porque además se siente capaz de realizar objetos cinéticos, no veo contradicción alguna, pero que no argumente que con ese arte dará belleza a todo el mundo, porque entonces está mistificando como en cualquier otra corriente.[90] 

 

 

 

 

[89] Dujovne. Ob. Cit.

[90] Diario “La Opinión”, 24 de julio de 1973, Bs. As.

 

 

 

CAPITULO VI  
LE PARC
Los Generativos