ARTE CINÉTICO ARGENTINO

        por OSCAR HAEDO

 
 
PRÓLOGO 
 
 

 

           Con los vagidos del recién nacido se inicia en el ser humano la lucha por la existencia, donde ocupará un lugar privilegiado las actividades físicas y espirituales, necesitadas de una constante dinámica en procura de su libertad, realización y condiciones creadoras, correspondiéndole al que se definiera como artista el otorgar forma plástica a dichas expresiones.

            El artista incorpora a su obra el espíritu de la época y civilización en que actúa, definido como el Signo Icónico registrador de su tiempo, plasmándolo desde el rudo diseño estampado en las cavernas de Lascaux hasta los aparatos sonoros de Tinguely.

            En estos registros de la vida de la sociedad mediante las artes, le corresponde al ARTE CINETICO ser receptáculo de lo tecnológico, científico e industrial que predomina en el siglo XX, siendo un arte impregnado de la dinámica, tensiones y vibraciones del hábitat del artista.

            En el presente ensayo procurase rescatar los testimonios que documentan la incidencia de lo dinámico en las artes de Argentina, ensayo que surge de investigaciones bibliográficas y hemerográficas, del contacto con los artistas cinéticos, comentarios de colegas y la consecuente asistencia a los eventos con connotaciones dinámicas.

            Testigo de constantes y profundos cambios en las estructuras artísticas, científicas, tecnológicas, industriales y sociales que modifican la estética, nos corresponde la misión de investigar y documentar al ARTE CINETICO a través del presente ensayo.